Comenzamos en un lugar clásico, imprescindible y que cualquiera al que preguntéis conocerá en Oxford: Carfax Tower. Esta torre, emplazada en la esquina de Cornmarket Street con High Street, es lo único que queda de la antigua St Martin's Church desde que fuera derruida en 1900 para hacer más espacio al tráfico rodado, y nos permite echar un vistazo a la ciudad a vista de pájaro por 2.10 libras. Muy imprescindible y todo lo que yo quiera, pero no tengo ninguna foto, así que esta vez nos tendremos que conformar con tirar de archivo.
Nuestros pasos nos llevan ahora por Cornmarket Street. Esta es la calle más animada de Oxford, llena de tiendas, casas de época y gente paseando a todas horas:
Una excelente muestra del Oxford del siglo XXI: las tiendas más a la última, en este caso de telefonía móvil, en un marco de hace 300 años. Todos los edificios están igual de cuidados y prácticamente todas las edificaciones están restauradas y son fieles a las de antaño, dotando a la ciudad de una grata atmósfera medieval[3]. Pd: No os mováis o la chica de rosa pastel, todo encanto, acabará con vosotros. |
El edificio principal del Wadham College, construido en 1613. Vemos la típica piedra marrón clara de todas las construcciones de Oxford, su césped[4] en la entrada típico de todos los college y el motivo central, en muchas ocasiones una torre, dedicado a resaltar la grandeza de la institución. Tuvimos la suerte de celebrar la cena del congreso en el elegante comedor de este college. Pd: ¿No os dan ganas de echar un partidillo de fútbol en ese verde manto? |
El edificio principal del All Souls College[5], fundado en 1438. Podéis encontrar muchas diferencias respecto al college anterior, pero las trazos principales son iguales. Pues así todos. Pd: ¿Qué, otra pachanga? |
En Radcliffe Square, además del All Souls College, también podemos ver la Radcliffe Camera, construida en 1749 para dar cabida a la biblioteca científica de la universidad. Pd: Saludad a Jairo, que os acaba de hacer una foto. |
En Radcliffe Square[6] también podemos ver la University Church of St. Mary the Virgin, del siglo XIII, y subir a su torre por 3 libras. Pd: El grupo de turistas, emocionado ante la belleza del lugar, se pregunta dónde está el pub más cercano. |
A la hora de comer íbamos a una tienda de bocadillos cercana y, cosa curiosa, los oxonienses no tienen ningún reparo en sentarse en los cementerios y comer lo que sea sobre alguna cómoda lápida. Supongo que es porque está calentita del Sol. Me pregunto que pensarían los difuntos en España, donde el plan sería hacer botellón.
En todos los congresos siempre hay un momento “foto de grupo” para la posteridad. Aquí tenéis la del presente para jugar a “¿Dónde está Trimurti?”
[1] Añadido al trayecto desde/hacia la estación de trenes/autobuses con maleta incorporada: aún se pueden ver lo callos de aquellos traslados.
[2] Por una vez, y sin que sirva de precedente, este gentilicio existe.
[3] La cual, pichel en mano, nos encargamos de exaltar en las cantinas de la ciudad con cánticos y chascarrillos soeces sobre cerdos de carreras, fardos de paja y enaguas de gran tamaño.
[4] Cada uno con un motivo diferente: circulares, ovalados, cuadrados, con caminos, sin caminos... es la mejor forma de saber en que college se acaba de despertar uno después de la juerga universitaria del día anterior.
[5] El nombre completo es “The Warden and College of the Souls of all Faithful People deceased in the University of Oxford”. Un aplauso por el poder de síntesis de los oxonienses.
[6] El Radcliffe al que nos referimos es John, ilustre estudiante de Oxford, y no a Daniel, actor que encarna a Harry Potter. Aunque dentro de unos años quizá cambien las tornas...
[7] Si es marzo-octubre y el tiempo lo permite, podéis alquilar barcas en el Magdalen Bridge y dar una vuelta por el río.
[8] En este college fue profesor J. R. R. Tolkien, ese hombre tan aficionado a los anillos y a la gente mediana.
[9] Aquí van unas instantáneas comentadas de las inundaciones, comenzando por el día 21 de julio de 2007 → 22 de julio → 23 de julio → 24 de julio → 25 de julio → 26 de julio. ¡De la que nos libramos!
[10] Nota al pie dedicada a Montse, admiradora del susodicho.
[11] Al día siguiente me levanté resacado, miré hacia mi derecha, vi el libro y pensé “¡Qué diablos he hecho!”. No me había leído ningún libro anterior del niño brujo este, y por supuesto no estaba interesado en el que acababa de comprar. Solución: leerme las dos últimas páginas para poder reventar al final a la gente y regalar el libro a alguien que lo sabría apreciar ¡de nada Norber!
[12] ¿Qué otras famosas crónicas de fantasía se escribieron también el Oxford? Respuesta: Las crónicas de Narnia, de C. S. Lewis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario